Los padres son los primeros responsables de la educación de sus hijos. Las escuelas católicas existen para ayudar a los padres en su responsabilidad, proporcionándoles un ambiente educativo de alta calidad y programas que complementen lo que se hace en la familia. Muchos padres de escuelas públicas se sienten cada vez más frustrados por la falta de transparencia en lo que respecta al plan de estudios. Y si no sabe lo que se enseña, ¿cómo puede saber si está en consonancia con los valores de su familia? En nuestras escuelas católicas sabrá lo que SE ENSEÑA y lo que NO.
La pandemia fue un reto para todos, pero sobre todo para los estudiantes, según lo han demostrado estudios recientes. La Evaluación Nacional del Progreso Educativo, conocida como la “libreta de calificaciones de la nación”, publicó recientemente un estudio que muestra que las escuelas católicas hicieron un trabajo mucho mejor a la hora de mitigar la pérdida de aprendizaje que resultó de la pandemia de COVID-19. El estudio de la Evaluación Nacional del Progreso Educativo muestra que los años de pandemia tuvieron un efecto profundamente negativo en el aprendizaje de los estudiantes de las escuelas públicas y autónomas de todo el país. Sin embargo, los resultados del estudio muestran que este no es el caso de los estudiantes de las escuelas católicas.
Mientras que muchas escuelas públicas permanecieron cerradas durante muchos meses, tanto a nivel nacional como aquí en Colorado, nuestras escuelas católicas de la arquidiócesis de Denver permanecieron abiertas, seguros de que esto era lo mejor para los estudiantes y las familias. Con muchos protocolos de salud en marcha, no solo mantuvimos a los niños y docentes seguros, sino que incluso vimos mejoras en los resultados de las evaluaciones; no experimentamos descensos abruptos como muchas otras escuelas.
© Archdiocese of Denver.